Marcos Rivas. «Es la hostia poder ir al festival con tu hijo de 4 meses y tu madre de 80 años»

Hablamos con el organizador del Festival Surfing the Lerez, que este año cumple siete ediciones con la misma premisa familiar y solidaria con la que nació.

Cómo surgió la idea de organizar este festival y con qué filosofía nace?
Este festival nace el 1 de septiembre 2011 en la Sala Karma de Pontevedra para promocionar un concierto de la banda mexicana Lost Acapulco, se le añadió al cartel la banda local Pedrito Diablo y los Cadaveras.

¿En qué momento y cómo se aventura uno a meterse en este lío?
Pues en la segunda edición, nos vamos a una edición por las calles y bares de la zona vieja de Pontevedra, todo en sesión diurna y terminando con djs en varios pubs de Pontevedra. A raíz de esto, el concello nos dice al año siguiente que veamos de pasarnos a la Illa das Esculturas y aquí empieza esta etapa.

A pesar de que sois un festival relativamente joven, este año será la séptima edición, ¿cómo ha sido la evolución a lo largo de los años?
Pues de ser una empresa pequeña, tanto a nivel hostelero como de producción de eventos musicales, hemos ido avanzando sobre todo con la logística y a nivel de seguridad. Nos hemos centrado un poco en que la gente que va esté segura y no les suceda nada. A nivel de restauración ha sido donde más hemos evolucionado, hemos pasado de hacer nosotros la comida a tener una variedad enorme de productos con food trucks y puestos.

¿Cómo se consigue organizar un festival tan completo, gratuito y además solidario?
Con el corazón y algunas empresas pequeñas de la ciudad como Sonart, empresa de sonido que lleva trabajando con nosotros 11 años, Til Diacrítico, Elefantas de Cacharrería, Bonobó, que este año serán los encargados de llevar la zona infantil y que durante otros años sus componentes han trabajado con nosotros, etc. También el concello de Pontevedra y ahora diversos patrocinios. Por la parte solidaria, Rede Axuda hace un papel muy importante con sus voluntarios, pero lo más importante es la implicación del público. Y el trabajo de Santiago Paredes en la parte gráfica ha sido magnífico este año.

¿Cómo se confecciona el cartel del Surfing the Lerez y qué criterios valoráis a la hora de
hacerlo?
Pues Santi es un grande y sin él, el Surfing no existiría. Todos los carteles son idea suya, menos la del último cartel, que se le pidió que fuese con algo gallego y relacionado con la ría de Pontevedra. Sin duda él lo bordó, creo que es el mejor, pero es complicado decidir o escoger.

En la pasada edición del 2016 una de las novedades fue que el festival se celebró en dos días, ¿se mantendrá este año la misma tónica?
Solo haremos la jornada del sábado, pero volvemos a añadir cosillas durante la semana anterior, en lugares y espacios de la Universidad de Vigo y otras cosas que aún no hemos decidido.

Consideráis el festival una “Romería do Rock and Roll” para todos en la que la oferta de actividades familiares ha ido creciendo, ¿cómo valora el público esta comunión de la música con los juegos populares y en familia?
Siempre fue la idea, una romería. Pienso que el público no piensa en el cartel a la hora de ir hasta allí, creo que estamos en el calendario de festivales, pero nos consideramos especiales, es la hostia poder estar con tu hijo de 4 meses y tu madre con casi 80 años.

¿Qué novedades podemos esperar para la edición de este año?
Pues seguimos trabajando en la seguridad, habrá alguna cosilla a mayores como un tercer escenario, que se llamará Estudio Bonobo y el cartel vuelve a ser con bandas de toda la península. Era muy complicado volver a hacer un cartel solo gallego con algo de repercusión, el año pasado creo que fue el mejor cartel de todos.

¿Algún grupo o banda que se os resista o tengáis más ganas de incluír en el cartel y aún no hayáis podido conseguir?
De momento todo lo que yo he querido ha venido, tampoco tengo ningún tipo de capricho. Algún año cerraremos con AC/DC, The Pixies o lo que sería para mi lo más grande… tener a Raphael en alguno de nuestros escenarios.