Hablamos con los vigueses Winter Project con motivo de la publicación de su nuevo EP «Paranoid Lullaby». Nos atiende Jorge Lorenzo, vocalista y guitarra de la banda, a quien le damos las gracias por su tiempo.

¿Qué se van a encontrar los seguidores de Winter Project cuando escuchen por primera vez ‘Paranoid Lullaby’?

Se van a encontrar algo muy distinto a Winter Time. Se van a encontrar cuatro temas entre la psicodélia y el rock progresivo en los que  la parte instrumental tiene tanto o más peso que la parte vocal. Van a encontrar una música compuesta para crear atmósferas, transmitir sensaciones y evocar imágenes entre el surrealismo y el impresionismo. Pretendemos que cuando la gente lo escuche tenga la sensación de conducir por una carretera en la que el paisaje cambia constantemente, como en Alicia en el país de las maravillas o algo así.

Este nuevo trabajo se caracteriza por ser una obra conceptual en torno a los sueños, con un aire psicodélico y experimental que nos recuerda por momentos a Pink Floyd. ¿Es este hecho el que os ha llevado a la decisión de crear esta obra en formato EP?

Teníamos estos tres temas (realmente Paranoid Lullaby es un solo tema dividido en dos pistas) desde hacía bastante tiempo, los descartamos de nuestro primer disco por que nos parecía que no encajaban con los otros que tenían un corte más clásico, pero entre ellos encajaban a la perfección, por el tipo de atmósfera que crean, por el sonido, los instrumentos hasta el tono en el que están los temas coincide. Nos pareció muy buena idea grabarlos en un EP separado, y creo que fue un acierto, nos ha quedado un trabajo muy cohesionado, se respira ese aire psicodélico y experimental del que hablas desde el primer segundo hasta el último.

“Paranoid Lullaby: Part II”, con casi 9 minutos de duración y un gran solo de guitarra de Luis Saldaña es un tema muy complejo. ¿Cómo ha sido el proceso de composición y creación de este impresionante corte?

La idea básica fue mía: una base rítmica muy repetitiva, con una línea muy básica de bajo que crea un efecto hipnótico sobre el que flotan los demás instrumentos y la voz, con una única variación en la melodía en cada estrofa que rompe la monotonía. Fue uno de los primeros temas que compuse para la banda, así que a lo largo de los años sufrió muchas variaciones. En directo la solíamos utilizar para hacer improvisaciones instrumentales, así que no sonaba nunca dos veces igual. Poco a poco le fuimos añadiendo partes, lo fuimos estructurando, dándole forma y sentido, lo último en añadir fue el solo de Luis, él compuso toda esa parte instrumental. Le dimos muchas vueltas y probamos de todo hasta que quedamos realmente satisfechos y consideramos que estaba lista para grabar.

¿Fue muy difícil grabar el disco en directo con temas tan largos y complejos?

Pues la verdad es que no, llevábamos mucho tiempo tocando los temas y teníamos muy claro lo que queríamos hacer, así que sólo necesitamos un par de tomas para cada tema. En muy poco tiempo grabamos la base rítmica (batería, bajo, teclados y guitarra rítmica) todos juntos, después añadimos voces, coros, teclados, algunas guitarras y alguna cosa más. En un fin de semana grabamos todo el disco.

Estáis realizando conciertos regularmente desde el inicio de este año, ¿cómo se presenta el 2017 en cuento a la actividad en directo?

La verdad, es que a pesar de lo complicado que está conseguir conciertos, no nos podemos quejar, desde que presentamos nuestro primer disco en enero de 2016 hemos mantenido un ritmo de conciertos bastante importante. Para lo que queda de 2017 tenemos cerrados bastantes conciertos, ya estamos confirmados para algún festival de verano. Para Octubre tenemos preparada una sorpresa que creo que va a sorprender a muchos, pero de momento es secreto.

Supongo que hacia finales de año haremos un parón para preparar bien la gira de presentación de nuestro próximo disco, que ya está en proceso de composición, y esperamos poder grabar antes de que acabe el año.

Muchas gracias Jorge, ¡y mucha suerte con el nuevo disco!





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