Los beneficios de la música tanto en adultos como en niños son muchos. Tocar un instrumento mejora las habilidades del lenguaje, la memoria, la conducta o la inteligencia espacial según un estudio realizado por Lutz Jäncke (Instituto Tecnológico de Zúrich). Tocar la guitarra es una de las opciones más sencillas de iniciarse en la música debido a su precio económico y suave curva de aprendizaje.
No hay edad para iniciarse en la música pero, lógicamente, cuanto antes mejor. Lo ideal para los niños es que den sus primeros pasos en el mundo musical a partir de los 5 años sin presión y, sobre todo, sin imposición alguna.
Es recomendable que sea el peque el que seleccione el instrumento, y cómo hoy en día, es muy sencillo y cómodo comprar instrumentos musicales por internet podemos hacernos con uno a un módico precio para empezar. En sitios webs cómo este podemos obtener información para adquirir nuestra primera guitarra sabiendo al menos cuáles son las claves en las que nos debemos fijar a la hora de adquirir nuestra primera guitarra.
Podéis preguntarle a cualquier guitarrista o músico lo que sienten al tocar un instrumento, sin duda la mayoría respondan que es terapéutico y que se sienten felices haciéndolo.
Tocar la guitarra es una forma de escapismo consciente.
Al tocar la guitarra creamos un espacio entre nosotros mismos y nuestra ocupada mente, dejando atrás el día a día y los problemas, para centrarnos en el placer de hacerlo.
Tocar la guitarra es terapéutico
Los beneficios de la musicoterapia son cada vez más evidentes, ya que las escuelas, las organizaciones benéficas y muchos organismos del sector de la salud utilizan la guitarra u otros instrumentos para controlar el estrés de una persona, mejorar su memoria, su comunicación y sus habilidades motoras. Aprender a tocar un instrumento musical es una de las mejores formas de estimular las habilidades cognitivas y sociales en la infancia. Además de agudizar el oído y mejorar la capacidad de expresión.
Potencia tu creatividad
Todos somos creativos de forma innata, incluso aunque no nos consideremos como tal. La guitarra y el piano son dos instrumentos fantásticos para dar rienda suelta a nuestra creatividad. Si necesitas ser creativo en otros campos en tu vida profesional coger la guitarra y tocar un rato creará un espacio en tu mente para ideas inspiradoras, ya que la guitarra nos vuelve a conectar con nuestra creatividad, y a su vez, nos ayuda a expresar nuestra verdadera autenticidad.
Perfecciona las habilidades cognitivas y la paciencia en la infancia
Tocar un instrumento es muy beneficioso para el desarrollo del cerebro de los niños fortaleciendo su capacidad de concentración y para resolver problemas. Todo ello redunda en una mejora de la memoria gracias a que practicar música estimula las áreas del cerebro relacionadas con las matemáticas.
No es muy común que los niños tengan paciencia y otra de las cosas buenas que tiene tocar un instrumento es que los niños aprende a apreciarla. El estudio y la práctica hacen que aprecien la importancia de la misma y desarrollen esta habilidad.
Mejora tu autoestima
Aprender a tocar la guitarra puede tener un efecto enormemente positivo en tu autoestima y confianza. A medida que aprendes a tocar y mejoras acabarás tocando delante de familiares o amigos al principio y, seguramente, acabarás tocando en algún concierto. Realizar esta actividad puede resultar aterradora al principio pero se irá al expresarte públicamente y compartir tu creatividad aumentará la confianza en ti mismo.Puede que seas uno de esos guitarristas que se ponen ansiosos antes de una actuación, aunque sepas tocar bien. Incluso, aunque no suene perfecto, reduce su ansiedad.
La música suele ser una actividad grupal y no debe subestimarse la mejora de nuestro bienestar debido a estar rodeado de personas con gustos e ideas afines. Además de que nos abre la posibilidad a conocer nuevas personas, descubrir nuevas amistades y por tanto tener una vida social más rica.
“La música también puede ser algo que compartimos con amigos y familiares. Las actividades sociales pueden ser buenas para nuestro bienestar en general y pueden fortalecer nuestras redes de apoyo.»
Y tú, ¿qué instrumento tocas?